(English)
El pasado 13 de Mayo se realizó una protesta pacifica en el consulado de Colombia contra el terrorismo de estado y en apoyo al Paro. 5 personas que participaron se enfrentan a un proceso judicial. Defendamos el derecho a la protesta en Colombia y en Barcelona
Desde el inicio del paro nacional en Colombia el pasado 28 de Abril, las muestras de apoyo desde Barcelona se han multiplicado por las calles. El 13 de Mayo un grupo de personas realizó una protesta pacífica en el consulado de la ciudad. La acción simbólica fue condenada por el Centro Democratico, el partido de ultraderecha de Uribe y la Cancillería de Colombia sacó un comunicado de prensa tachando la protesta en el consulado de «ataques vandálicos» y de «ingresar a la fuerza», dijeron además que las personas que se manifestaban pacíficamente habían «puesto en riesgo la vida de funcionarios y la prestación de los trámites y servicios que se ofrecen a connacionales». La realidad es que se trató de una acción pacífica, en las que se leyó un comunicado y se colgó una pancarta con un mensaje contundente de apoyo a las movilizaciones en Colombia. Fueron apenas 15 minutos en los que no hubo ningún tipo de enfrentamiento con las personas funcionarias y el mensaje se difundió por las redes a nivel internacional.
Hay más de 6 millones de colombianos y colombianas en el exterior, quienes viven con angustia e indignación la represión estatal al paro que, antes de la jornada del pasado viernes 28 de mayo en el que hubo 9 asesinados en Cali, ya se ha cobrado más de cuarenta víctimas mortales. Cifras documentadas por la ONG Temblores alertan de 22 denuncias por violencia sexual responsabilidad de la fuerza pública, al menos 47 víctimas oculares, y cientos de desapariciones. El polémico decreto 575 del 28 de mayo de 2021, que fue aprobado por el presidente Iván Duque, militariza 8 departamentos y 13 ciudades del país . Es el precedente inmediato al estado de conmoción interior que en otros países se llama estado de sitio o estado de guerra.
A pesar de ello, la esperanza del pueblo colombiano que resiste tras más de un mes es contagiosa. Las renuncias de altos cargos del gobierno se suceden, y parte de las reformas propuestas por Iván Duque han caído. Pero no es suficiente, el estallido social ha permitido volver a soñar con una transformación social más profunda.
El partido Centro Democratico ha querido, desde el inicio del paro, deslegitimar y criminalizar a la protesta social en Colombia, pero también a las numerosas movilizaciones de apoyo realizadas desde el exterior. Se están utilizando las mismas estrategias de criminalización que se usan en Colombia. Por ejemplo, vía twitter Álvaro Uribe se ha referido a quienes participamos desde Barcelona de concentraciones solidarias, como guerrilleros o, mostrando todo su racismo, de “venezolanos bolivarianos”.

Pero esto no ha quedado en Twitter. Recientemente, la Policía Nacional del Estado español ha abierto un atestado policial contra 5 personas que participaron de la ya mencionada protesta pacífica del 13 de mayo en el consulado de Colombia en Barcelona. Fueron a buscarlas a sus domicilios y las citaron para declarar en calidad de investigadas en comisaría el 21 de Mayo. Ese día se descubrió con asombro que la policía nacional quería atribuirles un delito de desórdenes públicos. El atestado policial ni siquiera ha llegado a instancias judiciales, donde un juez decidirá si admite o no a trámite el procedimiento, pese a que no existe una base jurídica que coincida con la protesta pacífica.
El consulado de Colombia en Barcelona y la policía nacional española están tras estas graves denuncias. Por ello emplazamos a la Cónsul Daniela Echevarria a respetar el derecho a la protesta en Barcelona, como también emplazar al gobierno colombiano y a sus responsables políticos y representantes diplomáticos al cese de toda criminalización de la justas y legítimas protestas del pueblo colombiano, así como las acciones de apoyo y de solidaridad que se vienen realizando de la otra Colombia fuera del país.
Esta carta es un mensaje no solo de la diáspora colombiana, sino también de organizaciones catalanas y del estado español, quienes se solidarizan y acompañan la digna lucha en Colombia contra las politícas de muerte y el terrorismo de Estado. Seguiremos acompañando las movilizaciones y, sobre todo, no vamos a dejar solas a nuestras compañeras y compañeros en Colombia. A la Colombia que lucha le decimos: “Si ustedes siguen, nosotras también”.
EL PUEBLO NO SE RINDE, CARAJO!

Deja una respuesta