Artículo de Bristle, Nº 17, Otoño 2004
El 14 de marzo de 1994 comenzó finalmente la construcción de la enorme ampliación de la carretera para «mejorar» la A36. Muchos habitantes de Bath se opusieron apasionadamente a este proyecto, que había sido rechazado por las objeciones desde que se propuso por primera vez en la década de 1920. Las obras comenzaron y amenazaron con atravesar las praderas de arroyos de Bathampton, parte del pueblo de Bailbrook, los bosques de Whitecroft y las laderas inferiores del antigua colina fortificada de Solsbury Hill.
Justo antes de que comenzaran las obras, Bel Mooney y Jonathan Dimbleby1 se unieron a cientos de vecinos y vecinas en un paseo por el trazado propuesto. Los miembros de Save Our Solsbury y Bath Earth First/Grupo de Acción de Solsbury Hill (SHAG) se comprometieron a enfrentarse a la carretera con métodos de acción directa. El primer día, los activistas bloquearon las excavadoras de los contratistas con candados D2. Durante el resto de la semana, las y los activistas bloquearon el recinto de la obra y se produjeron detenciones. En la segunda semana, la Tribu de los Dongas3, veteranos manifestantes de Twyford Down, llegó (con su cabra Spic) para unir fuerzas con la gente local y la lucha estaba en marcha.

Los dieciocho meses que siguieron fueron una lucha física y emocional para las personas involucradas de ambos lados y muchas vidas cambiaron. Se forjaron lazos, se crisparon los ánimos, se aprendieron habilidades para la vida, se destrozaron esperanzas en una época de amores y risas, de abrasiones y fracturas. Mientras que algunos habitantes de Batheaston estaban comprensiblemente desesperados por una circunvalación que desviara el tráfico de la calle principal de su pueblo, otros reconocieron que sus necesidades locales estaban siendo explotadas para promover un proyecto de ingeniería civil mucho mayor: una Euroruta para conectar con la costa sur. Las comunidades y los hogares se dividieron cuando el enorme corte de la intersección para impulsar una autopista de cuatro carriles atravesó los pueblos de Bailbrook y Swainswick. A lo largo de la ruta y en la colina fue un verano de amor, un verano de tomas de excavadoras, un verano de camaradería, interminables discusiones sobre la política de transporte, la seguridad de los pícaros, los espías de los campamentos, los pozos de mierda, las casas en los árboles, los guisos veganos comunales. En Beltane, cientos de duendecillos de la protesta alimentados con hidromiel bailaron toda la noche al ritmo de la música de Space Goats, Heathens All y Theo (Seize the Day), calentados por las llamas de un enorme bull-dozer de mimbre que ardía bajo el cielo estrellado.

Sin embargo, junto a los bailes de mayo4, las reuniones públicas, las manifestaciones y la redacción de cartas garantizaron no sólo un importante apoyo local a las protestas, sino que contribuyeron a cambiar el clima de opinión sobre el programa de construcción de carreteras a largo plazo. Amey Roadstone no tardó en darse cuenta de que su polémico contrato de construcción de la carretera se había convertido en un desastre de relaciones públicas. La negativa de ARC a hablar con el público hizo que sus oficinas regionales fueran ocupadas en acciones de apoyo en todo el país en la primavera de 1994. Otras protestas marcaron el día en que la carretera fue finalmente inaugurada en 1996. Se cortaron los árboles, se desalojaron los tejones y los accesos orientales a la ciudad de Bath, declarada Patrimonio de la Humanidad, quedaron definitivamente arruinados. Hoy en día, algunos siguen viéndola como una carretera principal útil, mientras que otros ven la masa de tráfico y los continuos atascos en Lambridge. En cualquier caso, ha demostrado ser un elefante blanco colosal.

Cuando los primeros vehículos de construcción se desplazaron, era poco probable que los activistas fueran capaces de derrotar a las fuerzas combinadas de las grandes empresas, la policía y la prensa local. Sin embargo, el impacto global de las protestas por las carreteras de mediados de los noventa -Twyford Down, M11, Fairmile en Devon, Pollock en Glasgow, Oxleas Woods (victoria), Salisbury Bypass (nunca se construyó) y, la más importante de todas, Newbury- fue un éxito. Una combinación de acciones directas y argumentos derrotó el programa tory de construcción de carreteras. Las empresas constructoras, como Amey Roadstone y Costain, tuvieron que hacer frente a enormes costes adicionales debido a la subida de las facturas de seguridad y de los seguros y a unas relaciones públicas muy malas. Cada vez había más pruebas de que, a largo plazo, las nuevas carreteras generaban más tráfico y no hacían más que agravar el problema de la congestión. La preocupación por la contribución de las emisiones de dióxido de carbono al calentamiento global también hizo que los argumentos se volvieran en contra de la construcción de carreteras en función de la demanda. Cuando una importante oposición pública molestó a los amos de las grandes empresas, el ministro del Interior tory de la época, Michael Howard, se apresuró a aprobar la Ley de Justicia Criminal en 1994. Sin embargo, se había creado una enorme cultura de oposición que se negaba a dejarse intimidar por la represión estatal o la seguridad de mano dura. Cuando se iniciaron las obras de la circunvalación de Newbury surgieron quince campamentos de protesta para hacer frente a su construcción. La aparición de una gigantesca tetera ennegrecida que había cumplido su función en Greenham Common en una de las hogueras de Newbury no sólo fue simbólica, sino extremadamente útil.

La lucha continúa
La batalla no ha terminado. Es posible que los enlaces de carretera a lo largo de la A36 estén simplemente escondidos a la espera de un momento políticamente oportuno para que la construcción comience de nuevo, amenazando zonas como el valle de Lympley Stoke y Salisbury. Ya se ha iniciado una petición para protestar contra una carretera de enlace A36-A46 en Bathampton. En Blackwood, en el sur de Gales, se ha librado esta primavera una feroz batalla para oponerse a una nueva carretera (véase el último número de Bristle y Bristol Indymedia). En Stonehenge, el Departamento de Transporte está planeando ampliar la actual A303 para convertirla en una enorme autovía de cuatro carriles. Se va a perforar un pequeño túnel cerca del propio monumento. Aunque es evidente que Stonehenge no será derribado, el Ministerio de Transporte no entiende que el contexto de las piedras en el paisaje y los restos prehistóricos circundantes son arqueológicamente tan importantes como la ubicación del propio monumento. Existe una importante oposición por parte de los habitantes de Wiltshire, los arqueólogos y los grupos ecologistas. Los planes de ampliación de la A303 también amenazan el paisaje de Blackdown Hills, en la frontera entre Somerset y Devon. No debemos permitir que los nuevos laboristas resuciten el programa de carreteras a escondidas. ¡Salvemos Stonehenge!

http://www.savestonehenge.org.uk https://stonehengealliance.org.uk/
NOTAS
1Pareja casada de presentadores/periodista reconocidos en el Reino Unido
2En castellano se denominan candados en U. Se utilizan para candarse por el cuello.
3Grupo de activistas que tomaron su nombre de las antiguas vías de comunicación que se alineaban a lo largo de Twyford Down, las Dongas.
4Baile de cintas, baile al rededor de una estaca en la que se entrelazan cintas.