A Planeta ha mostrado su apoyo solidario con el histórico activista peruano e indigenista, Hugo Blanco. Hoy, a los 85 años, Hugo Blanco Galdós, es considerado uno de los más importantes líderes internacionalistas por las luchas de la reforma agraria, y contra el extractivismo que perfora las entrañas de nuestros territorios.
Carmen Blanco Valer, hija mayor de Hugo ha realizado la denuncia y recabación de adhesiones
«»A raíz de que el medio alternativo peruano Wayka proyectase por las redes la semana pasada el documental «Hugo Blanco G, – Río Profundo» , han surgido virulentas reacciones por parte de grupos de ultraderecha contra mi padre y contra la cineasta Malena Martinez.
Tanto la fujimorista Marta Chavez como grupos de ex-militares, guardias civiles, etc han venido publicando comunicados en los cuales acusan a Hugo de graves delitos contra los Derechos Humanos y se indignan por el apoyo brindado por el Ministerio de Cultura a la proyección de la película.
Ante estas graves acusaciones un grupo de compañeros tomó la iniciativa de reivindicar a Hugo y sus luchas y redactaron un texto al cual les rogaría se adhieran solidariamente. Una vez que logremos juntar una cantidad significativa de firmas este será publicado en Perú».
Para firmar
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLScRC5hrZYPj6UeT5vlkXkQdOTMZXXK-3YAeK3iwXF4aLhpGVw/viewform
En reivindicación de Hugo Blanco
A propósito de la exhibición del premiado documental “Hugo Blanco Río Profundo”, un grupo de ex militares coludidos con una serie de ex políticos de derecha, junto con periodistas de publicaciones virtuales con títulos como El Montonero, han difundido algunos pronunciamientos denominando al ex-miembro de la Asamblea Constituyente de 1978, diputado y senador, elegido democráticamente por el pueblo soberano, Hugo Blanco Galdós, como terrorista y asesino.
Los abajo firmantes, ciudadanos/as de América Latina y más allá, repudiamos esas palabras que, a cincuenta años de los hechos que levantaron a los campesinos empobrecidos del Valle de La Convención, pretenden criminalizar y desprestigiar al político y activista por los derechos de la naturaleza. Hoy, a los 85 años, Hugo Blanco Galdós, es considerado uno de los más importantes líderes internacionalistas por las luchas de la reforma agraria, y contra el extractivismo que perfora las entrañas de nuestros territorios.
Hugo es un ejemplo por su incansable compromiso con la justicia y con los pueblos, sea en Pucallpa, Cajamarca, La Convención, en Chiapas o el Cauca. También porqué es uno de los pocos dirigentes de izquierda que hoy ha podido dar un giro significativo hacia otra lucha reivindicativa: por el medio ambiente. Blanco lo resume de manera implacable: “antes luchaba por el socialismo, hoy se trata de la lucha por la supervivencia de la especie”.
Esta vida dedicada a la lucha por la justicia, la democracia y la defensa de la Madre Tierra ha sido representada de forma magistral por Malena Martínez en «Hugo Blanco: Rio Profundo», lo cual ha provocado la reacción inacceptable de estos emblemáticos personajes de la derecha cavernaria, quienes consolidan en sus filas lo más duro del autoritarismo peruano, y que temen al ejemplo de este hijo de los cerros de Cusco, en donde aún hoy retumba el grito “Tierra o muerte: venceremos”.
Para firmar:
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLScRC5hrZYPj6UeT5vlkXkQdOTMZXXK-3YAeK3iwXF4aLhpGVw/viewform
El documental:
Retrato en díptico del legendario dirigente campesino y famoso trotskista conocido en Europa como el «Che Guevara Peruano»: Hugo Blanco, quien prefirió alentar el autogobierno de la gente y convertirse en un activista anónimo: Hugo Indio.
Partiendo de una visita al olvidado pueblo de la selva donde la lucha y la fama de Blanco se iniciaron la cineasta busca las huellas del joven de barbas negras, rifle al hombro y puño en alto gritando “¡Tierra o Muerte!”. Y encuentra las del movimiento campesino indígena original.
En la segunda parte – en las postrimerías del Conflicto Armado Interno peruano – la autora conoce al héroe de juventud de su padre en carne y hueso: un inagotable activista de barbas blancas que apoya a los pueblos indígenas campesinos en la defensa de su medio ambiente.
El film es un díptico cortado por un hiato de luto en memoria de las decenas de miles de indígenas peruanos cuya sangre corrió en ríos cuando el sueño idealista de toda una generación se convirtió en pesadilla: el sueño de la “revolución armada”. El film es a la vez un campo minado de elementos subliminales sonoros y visuales que remiten al trauma colectivo que fracturó al Perú a fines del siglo XX.
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